miércoles, enero 30, 2008

MAS SOLO QUE UN ZAPATO...

Allí estaba, en la semi penumbra, donde los ojos de quien quiera que entrara al cuarto no lo podian ver, había días en que estar allí se le hacía un placer...Sobre todo en esos días de calores espantosos, donde el ricon y la sombra, le permitian capear la temperatura. Ya hacía mucho que estaba allí, había escuchado comentarios, muy mal intencionados que hablaban de él y de su ostracismo, de su distanciamiento con el resto, de su pasar por la vida en esa soledad no elegida. Pero a él nada de eso le importaba, estaba allí y seguiría estando hasta que las cosas cambiaran, volveria a estar en compañía y podría salir de su no elegido distanciamiento si y sólo si, las cosas volvieran a ser como eran antes.


Recordar el hecho le ponia de mal humor, sabía que no era su responzabilidad, de hecho él había cumplido hasta el último con su deber, pero esas cosas no son recompensadas, ni siquiera reconocidas y es que a las personas sólo les importa lo que está al alcance de sus manos... No ven mas alla de su propia nariz.


Recordar le hacía mal, trato de eliminar es pensamiento, pero no lo logro, sólo se pudo ver a sí mismo caminando agil y contento, comodo y brillante, deportivo pero, sofisticado. Se vio en el momento de cruzar la calle y se vio dando los pasos que le correspondia dar al bajar de la vereda... Un amargo nudo se apoderó de su memoria, la angustia fue la misma de ese fatidico momento en que el vehiculo se les avalanzo sin alcansar a frenar. Se vio a sí mismo elevado como un guiñapo para ir a caer demasiado lejos, demasiado pesadamente, en el primer instante se sintio perdido, aturdido, pero al recuperar la conciencia el estupor se apoderó de él. Su acompañante, su pareja de toda la vida ya no estaba a su lado, yacia a varios metros lejos de él...El otro zapato, seguía unido a la pierna que arrancada de cuajo a la altura de la rodilla, dejaron a Rodrigo a partir de ese día convertido en lisiado. Hoy el zapato derecho de Rodrigo espera tras el velador a que algún día rodrigo se calce de él y lo lleve a pasear, desues de todo él cumplio y siguio con Rodrigo en el momento más dificl de su vida.


Para contar sin descontar

"La sola ilusion de que un día caminariamos sobre la luna, hizo que el pequeño hombre quisiera tocar con sus manos la eternidad, pero antes de que el astro inerte estubiera a sus pies, pudo hacer de ella un simbolo y opbjeto de su deseo, tan solo usando la palabra"...

Los cuantos vienen envueltos en distintos formatos, unos como tinta y papel en un libro otros como letra y música en una canción.

Martes de 21:00 a 23:00 horas, Bio Bar, Macul 97 Ñuñoa