lunes, marzo 24, 2008

CON FRIDA EN LOS SUEÑOS

Se aventuro por los pasillos que le conducían lejos de la habitación, allí quedaron sus objetos personales mas queridos, un par de libros, la figurita de yeso que le recordaba a su difunta Madre, la misma que saco de la estantería de la casa materna el día en que sacaban a su madre en el féretro en su ultimo viaje. En la pared la mirada de esa mujer tan profundamente seria a la que él llamaba, “Mi cejona”.
Rodeada de flores y vestida con encajes y colores ella le mira sin que se le mueva un músculo del rostro, él la mira de vez en cuando sintiéndose grande como si la mirada de ella le hiciera crecer desproporcionadamente.
Pero hoy se aleja de esa habitación, deja atrás su vida su historia y sus sueños, esos que le hacían buscar a la mujer del rostro serio y sensual sólo para caminar tomados del brazo, ver como las calles se visten de telas y en sus paredes personajes y gentes se amontonan a verles pasar y se van quedando quietos sobre los muros. Se había soñado muchas veces caminando acompañado de ella y sintiendo tras de si una sombra enorme, mucho más grande que su cuerpo, ella en sus sueños sólo le sonríe y se deja acompañar tomada de su brazo.
Pero él dejó atrás la habitación, hoy sólo camina, sabe que si camina y después de haber caminado sigue caminado, la encontrara, para ir juntos, del brazo con su enorme sombra y las gentes mirándoles desde los muros.

Para contar sin descontar

"La sola ilusion de que un día caminariamos sobre la luna, hizo que el pequeño hombre quisiera tocar con sus manos la eternidad, pero antes de que el astro inerte estubiera a sus pies, pudo hacer de ella un simbolo y opbjeto de su deseo, tan solo usando la palabra"...

Los cuantos vienen envueltos en distintos formatos, unos como tinta y papel en un libro otros como letra y música en una canción.

Martes de 21:00 a 23:00 horas, Bio Bar, Macul 97 Ñuñoa